Hola cenadores, comedores y merendadores varios.
Hoy os presento un auténtico y genuino TONTÓDROMO (los que me conocen saben a lo que me refiero con esta palabra): Ten Con Ten. Y, pese a ser un tontódromo, es un tontódromo que merece la pena. Luego volveremos a este tema.
Encontraréis este ¿restaurante? en la calle Ayala 6, entre Serrano y Paseo de la Castellana. Paso de comentar paradas de metro porque si elegís este sitio me da que no iréis en metro... No sólo porque no procede sino porque además tiene aparcacoches (va incluido en el precio de la comida, jajaja).
En estos tres años sin publicar he dejado mi feliz y despreocupada vida de estudiante y por eso las entradas del blog no se limitan al presupuesto de "la paga" que nuestros padres nos han dado durante tantos años... Y ¡qué narices!, ya que te matas a trabajar en esta época tan difícil lo mínimo es darse un caprichito de vez en cuando.
¿Qué podéis encontrar en Ten Con Ten? Pues un poco de todo, desde platos orientales hasta comida de lo más castizo. Y en ambas categorías os haré alguna que otra recomendación.
En caso de que os inclinéis por algo ligero y con toque oriental el pez mantequilla está espectacular. Aviso a navegantes: está hecho, en este caso dejamos el pescado crudo para otras entradas.
Si os gusta el ceviche, yo sé de uno que opina que está buenísimo. En este caso no daré mi opinión porque el plato en sí no me gusta, pero creo que esa persona tiene muy buen criterio así que podéis fiaros de él (si no os convence, por favor avisadme y le haré llegar vuestras reclamaciones).
Y si os apetece algo made in Spain no dejéis de probar el pulpo, las croquetas de tigre o, especialmente, la hamburguesa de rabo de toro. Sí, habéis leído bien, no sé a qué loco se le ocurrió hacer una hamburguesa de rabo de toro pero tuvo una idea brillante, es totalmente distinta a lo que estamos acostumbrados y está DELICIOSA.
No puedo pasar por alto la sección postres. A mí me cautivó el "Chocolate a la Reina", el que le puso nombre sabía lo que hacía. No voy a dar detalles sobre este postre, prefiero que os sorprenda. Está pensado para los más chocolateros (entre los que se encuentra una servidora) así que ya sabéis, reinas y reyes, si os cabe no os vayáis sin probarlo.
Terminada la cena, ¿qué tal si nos tomamos un copazo? El ambiente desde luego invita a hacerlo. Además de estar lleno hasta la bandera (incluyendo lunes, sí lunes, la gente lo revienta hasta los lunes, lo sé es increíble pero oye es un tontódromo y está de moda), la música está a un volumen más propio de una discoteca que de un restaurante. Además, si estás oyendo a David Guetta a determinados decibelios, sientes un vacío existencial si en tu mano falta una copa de balón.
No será por falta de alcohol. En Ten Con Ten son muy conscientes de su condición y de las consecuencias de poner música discotequera en un garito lleno de gente con ganas de pasarlo bien y han abastecido la barra central con todo tipo de ginebra, ron, vodka, whisky y demás espirituosas.
Si seguís la dieta del gin tonic (como mi compañera nocturna de referencia, una tía genial en todos los sentidos), en Ten Con Ten os pondrán uno de los ya míticos gin tonics que de tanto aderezo parecen ensaladas, también conocidos como gintonic/ensalada. Para que entendáis a lo que me refiero, os dejo testimonio gráfico de la experiencia:
Esto me recuerda que la vida de esta amiga está marcada por las ensaladas... Y con esto ya he dado demasiada información y me he desviado demasiado del tema. Por supuesto el gintonic/ensalada es el de la izquierda. Una servidora, en un intento inútil por mejorar su salud ha decidido mezclar el alcohol con zumo de piña y eso deja tan cortados a los camareros que sólo se atreven a echarle un poco de hielo.
Recomendación práctica: CUIDADO AL ENTRAR. Según abres la puerta de cristal hay unas cortinas opacas y acto seguido un escalón de lo más cabrito. Insisto: CUIDADO CON EL ESCALÓN.
Y otro aviso: está muy lleno y no es exactamente un restaurante sino un híbrido entre un restaurante y una discoteca lleno de maduritos con ganas de fiesta. Pero repito: merece la pena.
Para más información, os dejo link a la web oficial de Ten Con Ten:
http://www.restaurantetenconten.com/galeria.html
Por cierto, reservar se convierte en una especie de misión imposible así que no os deis por vencidos. Id directamente y si está lleno (que lo estará) haceos un hueco en la barra y pedid lo que se os antoje (ya sea gintonic/ensalada o algo masticable).